Cada 28 de Junio se celebra el Día Mundial del Árbol con el fin de informar a la población sobre la importancia de los árboles y concientizar sobre su preservación. Su primera celebración surgió en  Suecia en 1840 y luego fue instaurada por el Congreso Forestal Mundial en el año 1969. 

 Se consideran a los árboles como los pulmones del planeta. Son muy importantes para la conservación ambiental ya que:

– Liberan oxígeno y capturan gases de efecto invernadero

– Previenen la erosión de los suelos. 

– Regulan los ciclos hidrológicos

– Son hábitat para la diversidad biológica

– Son una fuente de materia prima para la elaboración de medicinas, alimentos, papel, combustible (madera y carbón), fibras y otros materiales naturales como corcho, resinas y caucho.

– Reducen la contaminación atmosférica, visual y sonora, generando bienestar fisiológico, sociológico y económico a la población.

La situación actual de los árboles es alarmante. Debido a los procesos de deforestación generados por el hombre de manera indiscriminada, se estima que,  desaparecen 16 millones de hectáreas anuales (lo que representaría un tercio de los bosques del mundo). Estas alteraciones producen no sólo pérdidas de hábitat, sino que además, incrementan la incidencia, durabilidad e intensidad de los incendios forestales.

Protegerlos es el compromiso de todos.